Cada etapa histórica tiene sus expresiones sensacionalistas de acuerdo con los procesos locales y las circunstancias particulares o, para decirlo mejor, cada contexto tiene su propio sensacionalismo. Antes era solo en la prensa, hoy se ha extendido a la televisión e incluso internet. Es una historia muy antigua que en el Perú tiene igualmente viejas raíces y que tuvo como primera expresión masiva el vespertino Última Hora, en 1950. El sensacionalismo peruano llegó a los extremos de la llamada “prensa chicha”, y la discusión sobre la ética y la libertad de prensa es más relevante que nunca. De poco prestigio social y político, el sensacionalismo en los medios masivos goza, sin embargo, de amplias audiencias y y esto obliga no solo a no desatenderlo, sino a avanzar en su estudio y examen crítico. Se habla mucho de la TV BASURA, la prensa amarilla, la prensa chicha, y ahora hasta el internet chicha cargado de FAKE NEWS e información morbosa. ¿está condenado el periodismo a seguir esta línea para vender? ¿tenemos alternativas frente al sensacionalismo? ¿Cuáles son los límites éticos del periodista y el periodismo? Para hablar de este tema tendremos a Cesar Mejia Chiang Doctor en Periodismo por la Universidad CEU San Pablo (Madrid, España). Magíster en Periodismo y Licenciado en Ciencias de la Comunicación por la Universidad de San Martín de Porres. Autor de varios ensayos en revistas científicas españolas (Estudios sobre el mensaje periodístico, Ámbitos de la Comunicación, Doxa Comunicación). En Madrid publicó “Devenir de los géneros interpretativos en la prensa generalista: Estudio de las secciones Internacional y España del diario El País” (Fragua, 2010), Es autor de los libros “Ensenada gris” (2010), “Cultura popular limeña y prensa chicha” (2011), “Encrucijadas globales. Posmodernidad mediática, multiculturalismo e Internet” (2012) y “El arte de la palabra justa. Labor periodística de César Vallejo y Jorge Basadre” (2014) entre otros.